lunes, 12 de febrero de 2007

Oh mi muñequito de cristal
Tu oscura fragilidad me conmueve
Mereces que te quieran con sumo cuidado
Que te sostengan en brazos de ternura y paz.

Oh mi apenado muñequito de cristal
Tu dolor te tiñe de penas, y crueldad
Pero a mi no me engañas,
Abatido y delicado.

Oh mi sombrío muñequito de cristal
¿Cómo lavar tus máculas?
¿Cómo conseguir sonrisas sinceras?
Mereces que el mayor de los ideales te arrulle

No te canses muñequito,
No te desvanezcas.
Yo no puedo tenerte,
Mis manos tiemblan…

No soy suficiente,
Y no debes conformarte
Tú vales el todo más sublime.
Y yo sólo soy esbozos de alegría,
Y detrás, detrás
Agonía y vacío.

Así que no te agotes,
Continúa enfrentando la espera,
A pesar de tu quebradizo material.
Ya llegará quien te contenga
Ya llegará quien te acompañe
Y te brinde tu merecida protección

Yo los estaré observando
Desde lejos… siempre
Cuidando de que nunca, NUNCA
Te dejen caer.

1 comentario:

Gsús Bonilla dijo...

...cuando el alma se hace añicos,
el vuelco del corazon no se hace esparar...sientes un escalofrío y es entonces cuando llega de visita el miedo....